More D4ta (Monkeytown, 2022), es una celebración del hecho de estar todavía vivos, una excusa para salir a la calle y lanzarse de nuevo a los clubes, y también a la crítica hacia el mundo en el que vivimos, un sistema que intenta aislarnos a base de móviles y pantallas de ordenador.

Como muchos músicos europeos, los tres miembros de Moderat sintieron que el mundo se abría bajo sus pies cuando estalló la pandemia de Covid-19. Lejos de bloquearse, aprovecharon el repentino tiempo libre para juntarse de nuevo en el estudio y escribir un puñado de canciones que reflejaran el carrusel de sensaciones y sentimientos que provocó la situación.

La banda presentará More D4ta en verano, recientemente lo han hecho en Sónar y en Bilbao BBK Live, y volverá a España en noviembre para dos conciertos en solitario. El día 6 en el Palau Sant Jordi de Barcelona, y el día 7 en XiZink Center de Madrid.

Navegar sobre las olas de la pandemia

Vamos a comenzar la entrevista hablando del elefante en la habitación: el confinamiento fue un momento duro para todos, pero sobre todo para los músicos. Tanto Modeselektor como Apparat estabais involucrados en giras en aquel momento. ¿Cómo afrontasteis la situación?

Al principio nos bloqueamos, fue una conmoción muy grande. Por primera vez en muchos años nos vimos obligados a quedarnos en casa, sin poder salir de gira, y esa es una situación a la que ya no estábamos acostumbrados.

Por suerte, habíamos planeado volver a grabar como Moderat y eso nos obligaba a pasar mucho tiempo juntos en el estudio, así que al final resultó que el momento en el que llegó la pandemia no fue tan inoportuno.

Me llaman la atención las reacciones tan distintas que tuvisteis ante la situación. Modeselektor grabó una mixtape muy energética, repleta de sonidos raveros, y preparó una librería de samples para Ableton.

Por su parte, Apparat aprovechó para trabajar en algunas de las bandas sonoras que había grabado en los últimos años, y las recopiló en varios volúmenes temáticos. ¿Se trataba de viejas ideas que necesitaban de tiempo libre para ver la luz o fue una manera de atravesar una época oscura?

Digamos que fue una mezcla de las dos cosas. Nuestra percepción de la situación global era tan surrealista y abstracta que a veces resultaba difícil mantener el optimismo. Así que intentamos utilizar todo ese tiempo del que de repente disponíamos de una manera positiva, trabajando en cosas que nos ayudaran a superar esa locura. Pero, en cierto modo, aquello fue todo un lujo: no es habitual que podamos sentarnos a trabajar con tanta tranquilidad.

El comienzo de una nueva era

¿Cuándo empezasteis a trabajar en el disco? ¿Estabais juntos en el estudio o fue un intercambio de ideas, como en los primeros tiempos de Moderat?

Al principio, nos limitábamos a quedar y a pasar tiempo juntos, algo que no habíamos podido hacer desde 2017, debido a nuestras agendas. A finales de 2020 empezamos a trabajar en las primeras ideas y durante la primavera siguiente nos encerramos por fin en el estudio.

Llevamos maquetas que habíamos preparado cada uno de nosotros por separado, y decidimos juntos cuáles de esas canciones nos apetecía desarrollar a fondo. Solo una parte muy pequeña de ellas ha terminado en More D4ata.

Vuestro disco anterior supuso el final de una trilogía. Así que me produce curiosidad el título del nuevo disco: More D4ta es, obviamente, un acrónimo del nombre de la banda y el número del álbum dentro de vuestra discografía. ¿Se trata solo de una broma o hay algo más ahí detrás?

Utilizar números en los tres primeros discos de Moderat obedecía a una razón muy clara: no queríamos sobrecargarlos con información innecesaria o inflarlos con conceptos artificiales. Una vez dicho esto, esos tres discos son coherentes entre sí, funcionan como una trilogía.

En cuanto a More D4ta, se trata de un título que deja espacios para la interpretación: es lo que es, el cuarto disco de Moderat, pero también es una nueva descarga de datos en un mundo cada vez más digitalizado, que está al borde del desastre.

El plan es que no existe plan

Imagino que la portada de More D4ta, con ese mapa del mundo cayendo hacia un agujero, como si alguien hubiera tirado de la cadena, está inspirada en esa idea. ¿Es un diseño de PFA Studios, como en los discos anteriores?

Sí, hemos vuelto a trabajar con ellos. El diseño definitivo es el resultado de un intenso proceso de intercambio de ideas, pero prefiero no dar muchas pistas acerca de lo que simboliza y dejar que cada uno lo interprete a su manera. Solo te diré que todos los colores y elementos que aparecen en la portada están escogidos con mucho cuidado y que nos hemos inspirado parcialmente en la imaginería medieval, aunque pueda parecer que no existe una conexión estética.

Me gusta mucho la paleta de sonidos que aparece en el disco. Desde el ambient hipnagógico de Fastland, hasta la brillante melancolía con la que termina Copycopy, cada canción parece flotar en un universo propio.

Eso me lleva a preguntarme si esas canciones están compuestas a partir de un grupo de sonidos o si es al revés, que cada canción evoluciona hasta encontrar un grupo de sonidos propio.

Ninguna de las dos cosas. Todas las canciones de More D4ta son el resultado de un proceso muy largo, pero nunca hay un plan predeterminado, porque preferimos dejarnos llevar por las sensaciones. Trabajamos en cada canción hasta que conseguimos encontrar un camino hacia su alma. Solo en ese momento alcanza su raison d’être.

More D4ta: los ruidos son las notas

Hay también muchos sonidos granulares en el plano de fondo de las canciones. ¿Habéis incorporado grabaciones de campo o es todo material sintetizado?

La atmósfera es muy importante para nosotros. Si no existe una atmósfera apropiada, la música no cobrará vida. Para conseguirlo, trabajamos mucho con grabaciones de campo y con nuestro sistema modular. Los ruidos son nuestras notas y los paisajes orgánicos, creados de manera analógica o digital, nuestros instrumentos.

La secuenciación del disco es otro de sus puntos fuertes. La manera en la que se engarzan los momentos de calma con auténticas explosiones de júbilo, la mezcla de excitación y melancolía se pueden comparar con los sentimientos que hemos atravesado a lo largo de la pandemia. ¿Teníais la intención de crear una historia conceptual sobre este tema?

Como hemos dicho antes, nuestro proceso creativo se basa sobre todo en las sensaciones. Hemos comprobado que los conceptos artísticos o racionales no nos ayudan a la hora de insuflar vida a las canciones. Pero el orden de esas canciones sí es una parte muy importante de un disco. Sobre todo para gente como nosotros, viejos amantes del formato álbum, que disfrutamos perdiendo el tiempo en esos detalles.

Pintar con las palabras

Las letras del disco tienen un aire impresionista, están repletas de imágenes y descripciones. He leído que Sascha se inspiró en los museos de Berlín que visitaba con su hija durante la pandemia. ¿Es esa la idea, traducir la pandemia a viñetas, a cuadros enmarcados?

Nuestra generación nunca había experimentado una auténtica crisis, así que por primera vez en nuestras vidas el mundo ahí fuera resultaba siniestro y amenazador, y lo peor es que no había manera de aislarse de lo que sucedía. En ese contexto, ver cuadros pintados hace varios siglos resultaba extrañamente tranquilizador, porque podías comprobar que las generaciones anteriores a la nuestra pasaron por cosas parecidas o incluso peores.

En general, las letras del disco están inspiradas en pequeños detalles de algún cuadro o en la historia que cuenta la pintura, pero siempre con la intención de que resulten lo más universales posible. Nos gusta imaginar que cada persona construye una historia propia a partir de ellas.

El peso de las letras respecto a la música también parece haber cambiado. La repetición de motivos y la creciente complejidad en canciones como Drumglow o Doomhype sugieren que la música se ha construido alrededor de las letras, cuando hasta ahora el proceso era el inverso.

Algunas de nuestras canciones todavía empiezan como un proyecto de remezcla entre nosotros tres, pero otras surgen de una manera más tradicional. A veces Sascha graba algunos acordes y líneas vocales, y trabajamos a partir de ellos, y otras veces la manera en la que se modifican o manipulan las grabaciones de voz es lo que da sentido a las canciones. Al final, todo esto añade variedad al disco.

More D4ta

More D4ta: un viaje hacia el interior

El vídeo de Easyprey es también un buen reflejo de estos tiempos pandémicos, con esos servidores amenazantes y todas esas personas solitarias, conectadas a sus ordenadores. ¿Estamos sometidos a demasiada información, incluso a nivel musical?

Absolutamente. Ese flujo continuo de datos hace enfermar a la gente. Hace que nos olvidemos de vivir de una manera consciente el aquí y el ahora. Al final, todo tiene una frecuencia. No solo la música: todo el mundo tiene una frecuencia propia, y es importante saber escucharla y vivir de acuerdo con ella. En ese sentido, nos gusta imaginar nuestra música como una puerta, una herramienta que permite a ciertas personas abrirse hacia su interior y conocerse mejor a sí mismos.

Como integrantes de la escena de clubes de Berlín, sois los más apropiados para hablar de lo que ha sucedido en vuestra ciudad en los últimos dos años.

Muchos clubes, fiestas y sellos no han sido capaces de sobrevivir, y otros han tenido que asumir cambios muy significativos. ¿Qué se ha perdido y qué ha evolucionado para mejor? ¿La ausencia de turismo ha provocado una cierta vuelta a los orígenes?

Si piensas en la escena de clubes como un organismo con vida propia, entonces está en su naturaleza evolucionar y adaptarse, con subidas y bajadas, mutaciones y extinciones. Al principio de la pandemia, muchos músicos se pararon en seco y tuvieron que aprender a utilizar el tiempo de otra manera.

Otros cambiaron completamente de medio y reorientaron su carrera: en Berlín, las primeras campañas de vacunación estaban organizadas por gente que venía de la producción de eventos musicales. En cuanto al estado actual de la ciudad, es pronto para juzgar si el cambio ha sido para mejor. Todavía hay muchas cosas que parecen complicadas, pero al mismo tiempo la gente está hambrienta de cultura de club, y el turismo terminará por volver, lo que nos lleva de nuevo a la idea de los organismos y su regeneración.

Sobre las tablas

Este año visitaréis varias veces España para presentar More D4ta. Habéis estado recientemente en Sónar y en pocas semanas estaréis en Bilbao BBK Live, y en noviembre volveréis para tocar en solitario en Madrid y Barcelona. Imagino que los dos espectáculos serán diferentes.

En los festivales siempre dispones de menos tiempo para tocar, así que tienes que adaptar el listado de canciones de acuerdo a ese tiempo. En los conciertos en solitario la dramaturgia es parecida, pero hay espacio para más canciones y para introducir otro tipo de variaciones y recursos. Ambas opciones tienen su particular atractivo, así que yo recomiendo a nuestros seguidores que intenten probar las dos.

El espectáculo visual ha sido muy importante en vuestros conciertos. Imagino que, al igual que la portada y el vídeo, será una creación de PFA Studios. ¿Puedes adelantarnos algo al respecto?

La idea principal es reutilizar parte del material empleado en la última gira que hicimos y crear un nuevo concepto a partir de ahí, así que el aspecto técnico del escenario será muy parecido al de los últimos conciertos, pero el contenido estará completamente rediseñado, tanto en lo referido a las luces como en lo relacionado con el vídeo.

Artista: Moderat
Trabajo: More D4ta
Label: Monkeytown, 2022
Fecha lanzamiento: 13 de mayo de 2022

More D4ta

moderat.fm

Entrevista: Vidal Romero

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